Evolución histórica

El origen de Torrevieja se remonta a la edad antigua, como atestiguan distintos estudios. El núcleo originario de población, como enclave costero, estaba protegido mediante la ubicación de torres, por la importancia de la extracción de sal originariamente realizada de la laguna de la Mata. Con el traslado de la extracción de la sal a la laguna de Torrevieja, tiene lugar la fundación administrativa de la actual población, a comienzos del siglo XIX. Desde sus orígenes, el desarrollo urbano y demográfico van directamente asociados a la producción salinera y a las actividades del mar, del tal forma que la economía del pueblo, en el siglo XIX, se basaba en la explotación de las salinas, la pesca, el contrabando con la costa norteafricana y el comercio marítimo transatlántico, mayoritariamente a Cuba y Puerto Rico (Huertas Morión, 1981). No obstante, a finales del siglo XIX, se dejó de comerciar con las colonias americanas, y adquirió relevancia la pesca y el comercio con las colonias norteafricanas.

En 1884, se produce un hecho relevante para el municipio y es que se inaugura el ferrocarril (como ramal Albatera-Torrevieja de la línea Murcia-Alicante que explotaba la compañía de los ferrocarriles andaluces) que contribuye al desarrollo de la economía local y comarcal (Cañizares Llanes, 2013).  Por un lado, se facilitó la entrada y  distribución de productos coloniales, y por otro lado, permitió el desplazamiento de la población de la comarca para uso de playas y balnearios; el turismo incipiente en el municipio, entendido como función veraniega (Pérez-Montesinos, 2017; Vera Rebollo, 1984). 

Durante el conflicto de 1914-1918, alcanza su apogeo la navegación comercial, a lo que contribuyó la construcción de barcos en astilleros locales. En los años 50, se construye el muelle de la sal, propiciando un crecimiento en la explotación y exportación de la sal de las salinas de Torrevieja (Celdrán-Bernabeu and Molina, 2004). Así pues, hasta 1960, la actividad económica en Torrevieja se basaba en tres grandes sectores: las salinas, la pesca y la navegación. Sin embargo, ya partir de este momento, se inicia la gran transformación del municipio ligada al fenómeno turístico y, en especial, a la actividad de la construcción (Cañizares Llanes, 2013; Vera Rebollo, Ivars-Baidal and Celdrán-Bernabeu, 2016). 

En la década de los 60, comienzan a llegar los primeros turistas extranjeros, principalmente suecos, atraídos por las diferencias climáticas y paisajísticas (Sala Aniorte, 2016). Posteriormente, comienzan a desplazarse otros turistas procedentes de Alemania y Reino Unido cuya motivación también era el clima, la playa y la diversión (Pérez-Montesinos, 2017), sumados a los turistas nacionales que también querían gozar de este entorno Mediterráneo. Así pues, la actividad turística, surgida en esta etapa, es el punto de partida del consumo de masas que actuó como revulsivo para la economía local y, supuso el inicio de la transformación del sistema urbano y  territorial (Vera Rebollo, Ivars-Baidal and Celdrán-Bernabeu, 2016; Pérez-Montesinos, 2017). 

En el caso torrevejense, el modelo de crecimiento turístico se basó en la vertiente residencial, es decir, en la construcción de nuevos asentamientos creados ex novo en la franja litoral o, en el núcleo urbano preexistente, para alojamiento estacional como segunda residencia en propiedad o para alquiler vacacional (Vera Rebollo, Ivars-Baidal and Celdrán-Bernabeu, 2016). De este modo, la población local comienza a dejar los otros sectores productivos (salinas, pesca y navegación), ya que el sector turístico y de la construcción ofrecía más rentabilidad a corto plazo. Por tanto, y como ha sucedido en otras localidades costeras españolas, la ciudad se ha especializado en el  sector servicios, provocando una pérdida de importancia de los otros sectores. En particular, Torrevieja, deja de ser un pueblo dedicado a actividades primarias, para convertirse en un destino turístico dominado por la promoción y venta de segundas residencias (Vera Rebollo, Ivars-Baidal and Celdrán- Bernabeu, 2016; Pérez-Montesinos, 2017).